Sayayín, una champeta sin azaros para los ángeles

"En aquel recinto azul, tocado por un instante por la tristeza, fue colmado de aplausos y acordaron componer una canción para recordar siempre al Sayayín."

La noticia ha llegado al paraíso celestial habitado por El jhonky, hermano menor de Celia y los cantadores de la otra dimensión, se ha abierto el salón de espumosa alfombra, donde danzan las sirenas del firmamento, todo el ambiente está embebido en los olores del vino que destilan en la casa del viejo Noé.

La Muela de Burro


Por: Wilson E. Blanco N.
Ocho y diez de la mañana. ¿Estamos listos? –me preguntó-. No le contesté nada. Me acomodé en el sillón sin que me lo pidiera. La radio transmitía desde Imola Italia la Gran Carrera de San Marino. El locutor emocionado mencionaba a cada uno de los corredores, pero enfatizaba mucho más en su paisano que ocupaba la tercera posición. Quise seguir por momentos la transmisión, pero el dolor me lo impedía. Abra, me ordenó con una voz casi imperceptible y calmada, mientras manipulaba la jeringa. Lo miré con el rabo del ojo para que no se diera cuenta que estaba nervioso.